¿Te has preguntado cómo hacen las grandes empresas comercializadoras de flores para que estas no se marchiten en el camino? ¿Qué pasa con aquellos alimentos que tienen que viajar largas jornadas en buques de carga y que tardan días enteros atravesando el mar? ¿Cómo hace una empresa como Ramo para que sus ponqués siempre estén frescos?
Las preguntas anteriores me han causado siempre curiosidad; al llegar a un supermercado me pregunto cuántos de esos productos (muchos perecederos) vienen de otro país y están frescos. ¿Es qué acaso la distancia, la altura y el tiempo no afectan su vida útil? O ¿será que no conocemos los procesos de poscosecha que tienen todos estos productos que ayudan a que las frutas y verduras que consumimos parecieran acabadas de cosechar?
El artículo a continuación trata sobre el proceso de poscosecha de una empresa de melones de Honduras llamada Agrolíbano. Escogí hablar de esta empresa pues su proceso de poscosecha es el que garantiza que la comercialización y distribución del producto sea intacta. Según Claudio Peña, profesor del curso Alimentos y Oportunidades de emprendimiento de la Universidad de los Andes; los procesos de Agrolíbano de lavado y empaque de producto son tan eficientes que las frutas viajan 33 días desde Honduras hasta Singapur y Hong Kong y llegan en un perfecto estado. ¿No es este un caso de éxito?
¿Cómo es el proceso?
Lo primero que hay que tener en cuenta para que el resultado de comercialización y distribución de un producto perecedero sea exitoso es que las características del producto tienen que ser de la mejor calidad. Para el caso de los melones de Agrolíbano, el gen del melón tiene que ser larga vida, lo cual garantiza que los melones sean fuertes y puedan mantener sus características de firmeza de sabor y salud para prevenir su envejecimiento.
Lo segundo, que hay que tener en cuenta para que la poscosecha sea exitosa, es el punto de corte. Si se determina adecuadamente cuándo se debe cortar un campo
de cosecha, se garantiza una vida útil más larga que al tener un mal cálculo del punto de corte.
El lavado y empaque
Las frutas cortadas se llevan directamente hacia su primer lavado para la desinfección. El lavado elimina todos los patógenos de la superficie del melón. El agua con la que se lavan los melones está clorada y tiene un Ph de 5 a 7. Después viene un segundo lavado, pero este es con agua caliente por tres minutos. Las temperaturas van cambiando, empieza con 75 grados centígrados y después esta se disminuye a 55 grados centígrados. Se preguntarán ¿cómo hacen para que la fruta no se dañe con agua tan caliente? La razón es que es muy poco el tiempo por el que pasa por el agua caliente y además la corteza de la fruta es tan gruesa que protege el interior.
Ya cuando los melones están impecables, y como pueden notar con el proceso descrito anteriormente, existe una muy pequeña probabilidad que no lo sean, se llega a la etapa del empaque del producto. La empresa cuenta con un tipo de bolsas especiales que eliminan toda el agua que se ha condensado, conservando la humedad apropiada para cada melón. Este punto es muy importante en el proceso ya que va a garantizar que el melón conserve su vida útil por el mayor tiempo posible, sin importar el destino final.
Pero, eso no es todo, ya empacados en bolsas y además puestos en cajas de una forma uniforme se envían por un túnel de aire forzado por un tiempo de cinco a ocho horas para que este enfríe por dentro las cajas para que la fruta llegue a su destino con la temperatura ideal.
Finalmente, las cajas se envían en camiones y aviones para su distribución, en estos tienen un monitoreo con sensores que chequean la cadena de frío, si la temperatura llega a elevarse, el sensor le avisa en tiempo real al supervisor para que solucione el problema.
¿No es asombroso el proceso por el cual pasa cada una de estas frutas que vemos en el supermercado?
Ahora, cada vez que te sientes a comer un melón, o una papaya, o hasta veas las flores de exportación en uno de los floreros de tu casa, puedes imaginarte el proceso que se sucedió para llega a tu mesa. Algunas han viajado hasta 30 días desde países de otros continentes y su sabor sigue siendo fresco y jugoso.
Por último, si te queda la duda de cómo hace una empresa como Ramo en Colombia para que sus productos siempre estén frescos, la respuesta se halla en que empresas como esa no tienen inventarios, pues su planta de producción es tan grande y eficiente que pueden hacer toda la producción demandada en una sola jornada y distribuirla por toda Colombia en menos de un día. Esto les garantiza que los productos lleguen siempre frescos a los diferentes puntos de venta y que la vida útil no se perjudique por demoras de producción.
Fuentes
Empresa Agrolíbano http://www.agrolibano.com/inicio.html
Entrevista
Claudio Peña
Profesor Universidad de los Andes
Alimentos y Oportunidades de Emprendimiento
Otras fuentes