El caucho natural es originario de América, particularmente del bosque tropical sudamericano, más conocido como la Amazonía. En un principio fue considerado como una sustancia curiosa nada más y, debido a la falta de conocimiento técnico en el área, no fue posible iniciar una explotación exitosa luego de su descubrimiento en la época de la colonización.
No fue sino hasta el siglo XVIII en que, gracias a un explorador francés, se dio a conocer la importancia del caucho y los diferentes usos que podía tener. Una vez se despertó gran interés por el producto en Europa, los ingleses se adelantaron y a finales del siglo XIX, tomaron unos cuantos árboles de las selvas de Brasil para llevarlos a Malasia, territorio colonial inglés con el mismo clima de la región tropical americana. Allí realizaron adelantos en la botánica de la planta, estudios y cuidados particulares de los cultivos y la forma más eficiente de extraer el látex.
A las plantaciones inglesas pronto siguieron las holandesas en Indonesia, las estadounidenses en Liberia (África) y las francesas en Indochina (Historia y Biografías, s.f.). Es por esta razón que en la actualidad el sudeste asiático es el mayor productor de caucho natural, ya que con los conocimientos y técnicas adquiridas lograron que la producción de las plantaciones fuera mejor y más abundante que en los países latinoamericanos, en donde se seguía explotando el caucho mediante prácticas obsoletas y sin mayor conocimiento respecto al tema.
El caucho natural proviene del hevea brasiliensis, más conocido como árbol de caucho. Es una planta que tiene entre 35 a 40 años de vida útil. Una vez culmina la vida útil del árbol, se puede explotar su madera, la cual es muy apetecida en el mercado de muebles. No obstante, el tiempo que toma un árbol en empezar a producir es de aproximadamente 7 años y en un principio su producción es baja. A medida que el árbol sigue creciendo llega un punto en el que la producción alcanza su pico y se estabiliza de ahí en adelante. Esta puede llegar a ser de 3.5 kg de caucho seco por árbol, anualmente. El hecho de que sembrar árboles de caucho implique ganancias a largo plazo, pero bastante inversión en el corto, hace que sean pocas las personas dispuestas a tomar el riesgo de entrar en el negocio.
Por otro lado, se dice que el caucho natural es un commodity al ser un bien producido en enormes cantidades que ha sufrido poca transformación y de baja diferenciación entre sí. Sin embargo, su demanda es alta debido a que es un componente básico de productos mucho más complejos. Tanto el látex líquido como el coágulo de caucho seco son formas de materia prima del caucho, las cuales son demandadas en grandes cantidades por diferentes tipos de industrias. Mientras que los bloques de caucho seco se utilizan en la industria de los neumáticos principalmente, el látex se usa para hacer guantes, globos o condones. El hecho de que el caucho natural sea un commodity, significa que su precio depende del precio internacional. Lo anterior implica un riesgo más para los pequeños productores y para las empresas, ya que se presentan muchas variaciones, fluctuaciones y tendencias que los exponen al riesgo de vender por debajo de sus costos cuando los precios internacionales bajan (Belaunde, 2012).
Sumado a lo anterior, es importante tener en cuenta que los cultivos de caucho pueden ser propensos a contraer enfermedades y plagas que, si no se manejan con cuidado, pueden traer serias consecuencias en la producción. De igual forma, los fenómenos climáticos y las catástrofes naturales pueden favorecer, perjudicar e incluso acabar con los cultivos. En otras palabras, la siembra y la explotación del caucho natural no es una tarea fácil. Como se mencionó anteriormente, dicha actividad agraria implica un riesgo alto que no cualquiera está dispuesto a correr.
En Colombia, los cultivos más importantes de caucho se encuentran en los departamentos del Meta, Caquetá y Santander. No obstante, presentan falencias en cuanto a la escasez en tecnología para procesos de transformación y falta de capacitación en la mano de obra, entre otras. Es por esta razón que Colombia, como país productor de caucho, todavía se encuentra a años luz de países como Malasia, Indonesia y Tailandia. Todavía falta mucho camino por recorrer para empezar a producir caucho a precio y calidad competitiva en el mercado mundial.
Bibliografía
«Commodities», E. r. (9 de Septiembre de 2012). Gestión – El diario de economía y negocios de Perú. Recuperado el 15 de Agosto de 2017, de Riesgos financieros : http://blogs.gestion.pe/riesgosfinancieros/2012/09/el-riesgo-de-commodities.html
Casiopea. (27 de Septiembre de 2010). Recuperado el 15 de Agosto de 2017, de Historia del caucho: http://wiki.ead.pucv.cl/index.php/Historia_Del_Caucho
Historia y Biografías . (s.f.). Recuperado el 15 de Agosto de 2017, de Origen e historia del caucho: plantaciones y producción del caucho: https://historiaybiografias.com/caucho/