El proceso de paz, más allá de la negociación en la Habana requerirá de un esfuerzo de todos los colombianos orientados al perdón y la reconciliación. En internet hemos encontrado este mensaje de Mahtama Gandhi que queremos compartir con todos nuestros lectores con el ánimo de que nos ayude a reflexionar sobre la manera en que debemos actuar en el caso de una eventual firma y que creemos puede servir de guía a la actitud de aquellos que ocupan puestos de importancia en el proceso.
Mi Señor…
… Ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes y a no decir mentiras para ganarme el aplauso de los débiles. Si me das fortuna, no me quites la razón. Si me das éxito, no me quites la humildad. Si me das humildad, no me quites la dignidad. Ayúdame siempre a ver la otra cara de la medalla, no me dejes inculpar de traición a los demás por no pensar igual que yo. Enséñame a querer a la gente como a mí mismo. No me dejes caer en el orgullo si triunfo, ni en la desesperación si fracaso. Más bien recuérdame que el fracaso es la experiencia que precede al triunfo. Enséñame que perdonar es un signo de grandeza y que la venganza es una señal de bajeza. Si me quitas el éxito, déjame fuerzas para aprender del fracaso. Si yo ofendiera a la gente, dame valor para disculparme y si la gente me ofende, dame valor para perdonar. ¡Señor… si yo me olvido de ti, nunca te olvides de mí! |
Su esfuerzo fue apoyado por muchos. Al punto de lograr un triunfo por la vía de la paz.
No importa que ideología o posición política tengas
… todos coincidimos en algo.
Queremos paz…