Fotografía de Leio McLaren. Parque Nacional Yosemite, EE.UU. Unsplash.
Según el último informe de turismo del MinCIT[1] “El turismo en cifras: octubre 2021”, la ocupación hotelera nacional en el presente mes superó en 25,8 puntos porcentuales (p.p.) la ocupación del mismo mes del 2020. De igual forma, el número de personas que realizaron turismo interno o excursionismo en el tercer trimestre del 2021 creció en 74,35 p.p. con respecto al tercer trimestre del 2020.
Este crecimiento record en cifras refleja un cambio en las tendencias de consumo e intereses del viajero. En esta nueva realidad, en la que aún se vive la incertidumbre e incomodidad por los nuevos protocolos internacionales de inmigración, cancelación de vuelos y la preocupación latente ante un posible contagio, el turismo de masas, donde conocer más destinos en menos tiempo era el boom, ya no es el protagonista. Las nuevas tendencias apuntan hacia un turismo local, de bienestar, sensorial y de lentitud.
Según estudios realizados por el Dr. Claudio Milano en la Escuela Internacional de Turismo y Hospitalidad Ostelea de Barcelona, desde el 2010 inició la tendencia del movimiento slow, un turismo de bienestar, de lentitud, y sensorial, un turismo que ha evolucionado de acuerdo con las necesidades de un sector en constante cambio y que responde “(…) a elementos como la cultura, experiencia, emoción, sentido, responsabilidad, sostenibilidad, autenticidad y exotismo”.
El turismo o movimiento slow, según el Centro virtual de formación turística Innovtur,
“No es otra tipología o segmento turístico, en esencia forma parte de un estilo de vida y se puede concebir como una forma de viaje más relajada y sin prisas que supone desconectarse de la rutina para reconectarse genuinamente consigo mismo y con el lugar, su cultura, costumbres, gente y entorno medioambiental, desde una actitud de viaje distinta a la tradicional (…)”. (Innovtur, 2018).
En ese sentido, este movimiento se acopla con la naturaleza, lo rural y el atractivo que ofrece para sus visitantes; personas que cada vez más van en busca de algo más allá de una experiencia, más allá de una emoción, van en busca de despertar los sentidos. A lo anterior se suma el crecimiento de la oferta de alojamientos rurales, pues en especial, en las cercanías a las ciudades principales, la creciente demanda no ha sido del todo cubierta y lo anterior se ha convertido en una oportunidad de negocio interesante para los emprendedores.
Fotografía de Juan Pablo Carvajal. KingDome Glamping, Guatavita, Cundinamarca.
Guatavita es una muestra del potencial que tiene el turismo de naturaleza y de lo bien que este se acopla con las nuevas tendencias de consumo acentuadas por la pandemia. Dentro del turismo de naturaleza, existe un concepto que se ha vuelto moda recientemente denominado “Glamping”. La palabra Glamping surge de la combinación de las palabras Glamur y Camping, haciendo alusión a una experiencia de acampar con las comodidades y/o lujos de un hotel convencional.
Cuando inicié con mi familia el proyecto de alojamiento rural en 2019, éramos los segundos en ofertar Glamping en Guatavita. Hoy en día, son más de 40 los Glampings que se reconocen en los alrededores.
Fotografía de Juan Pablo Carvajal., Guatavita, Cundinamarca.
El crecimiento del turismo de naturaleza ha supuesto nuevas oportunidades y nuevos retos, los he vivido personalmente. Estos alojamientos han significado una oferta de trabajo estable que dista de la realidad que muchas de las personas que lo ejercen tuvieron antes de emplearse. Según el Departamento Nacional de Planeación en su ficha de caracterización de Guatavita, en 2015 el 58% de la población se encontraba dentro del Índice de Pobreza Multidimensional, y actualmente el sector turístico ha logrado emplear directa e indirectamente a los habitantes de la región.
Con las estadísticas actuales no es fácil medir el impacto que ha tenido el turismo en los habitantes locales. No obstante, esto no ha sido un problema para los viajeros que han sido testigos de este impacto positivo, los cuales valoran ser atendidos por un personal autóctono, conocedor de las costumbres y cultura de la región que han visitado. El 48% de los 359 comentarios que ha recibido mi alojamiento en Booking.com menciona el servicio o atención al cliente como el atributo más destacado durante su estadía, y sumado a eso, poder disfrutar de vistas naturales, aire fresco, desconexión, e incluso el frio de la noche destacan entre los demás. Los anteriores hacen alusión a las sensaciones y sentimientos que los huéspedes tuvieron durante su estadía.
En conclusión, vemos que el turismo de naturaleza ha llegado para quedarse, el Glamping como referente de este sector es muestra de ello. Este turismo se acopla con las nuevas tendencias que se han forjado en las últimas décadas, se ha acentuado por la pandemia y responde a los intereses del viajero en busca de sentido. La creciente demanda de este tipo de turismo ha sido aprovechada por emprendedores que no tienen conocimiento sobre hotelería o prácticas sostenibles como, por ejemplo: el cuidado del agua o el manejo de desechos y aguas negras. Lo que se hace latente como una amenaza para el medio ambiente, razón por la cual se debe abordar prontamente. Así pues, sugiero prestarle especial atención a este tipo de problemáticas y abordarlas en un marco constructivo, con el fin de ayudar al pequeño empresario a garantizar su sostenibilidad y con ello permitirle al viajero seguir encontrando el sentido en el turismo de naturaleza.
Referencias
Departamento Nacional de Planeación. (2015). Ficha de caracterización.
Innovtur. (2021, 18 febrero). ¿Qué es el turismo Slow? Una forma natural de viajar, una actitud hacia el viaje. Recuperado 28 de enero de 2022, de https://www.innovtur.com/slow-tourism-una-forma-natural-de-viajar-una-actitud-hacia-el-viaje/
McLaren, L. (2017, 1 julio). Me on a cliff in Yosemite [Fotografía]. Unsplash. https://unsplash.com/photos/nGwhwpzLGnU
Milano, C. (2018). Tendencias en Viajes y Saturación Turística. Barcelona: Ostelea School of Tourism & Hospitality.
Ministerio de Comercio, Industria y Turismo. (2020). Política de Turismo Sostenible: Unidos por la naturaleza.
Ministerio de Comercio, Industria y Turismo. (2021). El turismo en cifras: Octubre 2021.
[1] Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.