Desde hace cuatro generaciones su familia se dedica a la producción de café pergamino[1] para comercializar con la Federacion Nacional de Cafeteros (FNC). Gracias a la bonanza cafetera que se dio en el siglo XX en Colombia, este negocio fue muy rentable para los abuelos y padres de Darwin, por este motivo pudieron comprar algunas parcelas para continuar con el cultivo de este grano.
Pero Darwin no contó con la misma suerte, ya que la FNC sigue pagando la carga al mismo precio desde hace 30 años. Por esta razón, Darwin recuerda con algo de tristeza como sus padres y abuelos tuvieron el dinero para tecnificar sus cultivos pero decidieron gastárselo en “pola”.
Darwin fue el primero de su familia que tuvo la posibilidad de acceder a educación, y gracias a un técnico agropecuario en el SENA ahora tiene una visión mucho más amplia que sus predecesores. Por esta razón, se dio cuenta que el negocio en este momento no es producir café pergamino, sino saltarse todos los intermediaron en la cadena de valor y llegar hasta el consumidor final.
De esta forma, Darwin se vio en la necesidad de implementar internet en su finca y así lo hizo. Con esta herramienta logró estudiar cómo se lleva a cabo el proceso de transformación del café desde el grano hasta un producto listo para consumir. Además, gracias al internet Darwin pudo educarse en temas como contabilidad básica, manejo de inventarios, educación financiera, auto motivación y algunas bases de inglés.
Así, con mucho trabajo, esfuerzo y dedicación Darwin logró establecer en la finca de su madre la cadena de producción completa del café, exceptuando el empaque, y gracias a una estudiante de la Universidad de los Andes comercializará su producto en mercados internacionales. Actualmente, Darwin vende una libra de café listo para consumir a 10,000 pesos, este precio se puede comparar con el resto de caficultores de la zona que venden una carga de 250 lb tipo pergamino a 720,000, esto quiere decir que el precio por libra es de 2,800.
En la actualidad, Darwin compra la cosecha de su madre, padre, abuelo y algunos productores de la zona, desde quele alcance el flujo de caja, con el fin de transformarlo y comercializarlo bajo la marca Café Ar.
[1] Cuando ya se tiene el café seco, se le denomina café pergamino, puesto que al grano lo cubre una capa amarilla opaca llamada pergamino. Una vez se terminan los procesos de beneficio, incluyendo el secado, el café se somete a un nuevo proceso denominado trilla de café, para obtener el café almendra o café verde.