El inicio de Cultivo de Palma de aceite como proyecto social, ambiental y energético, toma impulso en Colombia, a partir del siglo XXI, como una actividad viable para la generación de empleo y riqueza social y económica en el campo bajo el mandato del presidente Álvaro Uribe y su primer ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Carlos Gustaba Cano Sanz, en 2005. “Fue quizá el primer funcionario en introducir en el Gobierno el tema del calentamiento global; a él se le metió en la cabeza la idea de utilizar tierras ociosas de la Orinoquía para convertirlas en grandes “sumideros de CO2” mediante la reforestación, en concordancia con los lineamientos del Protocolo de Kyoto” (Rueda & Marlyn, 2013). Pues la situación energética y sus proyecciones, preocupaba a la nación, particularmente el abastecimiento de diesel, debido a las “grandes dificultades de Ecopetrol para proveer ese combustible, como son, en primer lugar la disminución de las reservas probadas de hidrocarburos pertenecientes a la nación, el alto contenido de azufre de diesel que venía produciendo”, importándose alrededor de 250.000 t/año y el gobierno proyectaba 1.500.000 t/año en 2020, “la dependencia de importaciones de este combustible pasaría de 7 a más del 30 por ciento antes de 15 años” (Rueda & Marlyn, 2013). Fraguándose las zonas francas y Conpes alrededor de la actividad y a la vez consolidándose la palma africana, como principal materia prima para la elaboración del Biodiesel, debido principalmente a su rendimiento promedio de aceite, como muestra el siguiente gráfico tomado de Fedepalma.
Desde la introducción en 1932 de la palma africana de aceite en Colombia, con fines ornamentales en la estación agrícola de Palmira, Valle del Cauca. (Fedepalma), el cultivo en Colombia ha mantenido un crecimiento sostenido. “A mediados de la década de 1960 existían 18.000 hectáreas en producción y hoy existen más de de 360.000 hectáreas (a 2010) en 73 municipios del país”. De acuerdo a los últimos datos estadísticos liberados por la Federación Nacional de Biocombustibles a 2012, Colombia cuenta con 452.435 hectáreas de palma sembradas, de las cuales 152.482 se encuentran en desarrollo y las 299.953 hectáreas restantes en producción, como lo muestra la figura 2.
Asimismo, la Figura 3, muestra que la producción de biodiesel se ha incrementado de una forma exponencial, pues de 169.411 toneladas en 2010, paso a 489.991 toneladas en 2012, aumentándose por consiguiente las ventas de biodiesel, evidenciándose la venta de casi el 100% de lo producido.
A partir de lo anterior, los “departamentos que poseen más área sembrada en palma de aceite como lo muestra la Figura 1, son en su orden: Meta (1), Cesar (2), Santander (3), Magdalena (4), Nariño (5), Casanare (6), Bolívar (7), Cundinamarca (8) y Norte de Santander (9)” (Fedepalma). De la misma manera, la Tabla 1, ilustra las plantas productoras de biodiesel en funcionamiento, con su capacidad de procesamiento toneladas por año, área sembrada por las mismas.
|
|
|
Región |
Empresa |
Capacidad (t/año) |
Capacidad (lt/día) |
Área sembrada (ha) ** |
Empleos directos |
Empleos indirectos |
Fecha entrada en operación |
|
|
|
Norte, Codazzi |
Oleoflores |
60.000 |
193.477 |
16.251 |
2.739 |
5.478 |
ene-08 |
|
|
|
Norte, Santa Marta |
Biocombustibles Sostenibles del Caribe |
100.000 |
322.461 |
28.277 |
4.766 |
9.532 |
mar-09 |
|
|
|
Norte, Barranquilla |
Romil de la Costa |
10.000 |
– |
– |
– |
– |
– |
|
|
|
Norte, Gálapa |
Biodiésel de la Costa |
10.000 |
– |
– |
– |
– |
– |
|
|
|
Norte, Santa Marta |
Odin Energy |
36.000 |
– |
– |
– |
– |
– |
|
|
|
Oriental, Facatativá |
BioD |
115.000 |
370.830 |
34.422 |
5.801 |
11.603 |
feb-09 |
|
|
|
Central, B/bermeja |
Ecodiesel de Colombia |
115.000 |
370.830 |
34.581 |
5.828 |
11.657 |
jun-08 |
|
|
|
Oriental, San Carlos de Guaroa (Meta) |
Aceites Manuelita |
120.000 |
386.953 |
36.444 |
6.142 |
12.285 |
jul-09 |
|
|
|
Oriental, Castilla la Grande (Meta) |
Biocastilla |
15.000 |
48.369 |
– |
– |
– |
– |
|
|
|
|
TOTAL |
581.000 |
1.692.920 |
149.976 |
25.276 |
50.555 |
|
De las “3 millones de hectáreas potencialmente disponibles para este cultivo” (Rueda & Marlyn, 2013), el 15% ha sido sembrado, y del total de área sembrada, 33% fueron cultivadas por empresas. Además, entre todas, cuentan con la suficiente capacidad de procesar el aceite de palma producido en el año 2012 en Colombia de 489.911 toneladas por año, habiendo cabida para procesar aproximadamente 100.000 toneladas de más, que vendrán de la pronta maduración de los cultivos en desarrollo, generando tal vez, un aumento en el número de empleos, que por hoy se encuentran en alrededor de 25.276 empleos directos e 50.555 indirectos.
Producción de la Palma de Aceite Africana
“Este cultivo logra rendimientos de 10 toneladas por hectárea, entre los veinticuatro y treinta y seis meses; los mayores rendimientos por hectárea se obtienen entre los ocho y diez años; de 18 a 22 toneladas por hectárea y se puede mantener durante los siguientes veinte a veintitrés años, con producciones que oscilan entre las 26 y 32 toneladas. La vida productiva del cultivo se estima entre veinticuatro y veintiocho años, llegando a mantener su producción hasta los cincuenta años, aunque la altura que alcanza la palma, hace difícil la recolección de los frutos.” (Grupo de Cuentas Satélite, 2012).
Para alcanzar tales niveles de producción de aceite a partir del proceso industrial de la palma africana, Elaeis guineensis Jacq, es necesario, como actividad preliminar, el análisis de la ubicación donde se pretende cultivar la palma “con el fin de identificar las posibles limitaciones y comportamientos de la productividad y de los costos de producción” (Grupo de Cuentas Satélite, 2012) para proceder con la respectiva preparación del terreno, su correspondiente nivelación, la adecuación de canales de riego y drenaje, y así “una vez la palma haya alcanzado una altura aproximada de 1,30 metros, se procede su siembra en el lugar definitivo” (Aceites Manuelita S.A). Una vez, trasplantada la planta del vivero hacia el lugar definitivo, inicia el proceso de mantenimiento donde “los programas de fertilización se inician con base en los resultados de varios experimentos representativos sobre los suelos de la plantación y los resultados de los análisis foliares.” (Aceites Manuelita S.A), a su vez se realiza la siembra de arvenses, que es “un cultivo de cobertura entre las palmas para buscar un asocio entre las dos plantas y así proteger el suelo y retener la humedad, estos cultivos aseguran la fertilidad y la calidad del suelo; las coberturas más utilizadas son las leguminosas las cuales tienen la propiedad de fijar en los suelos el nitrógeno disponible en el aire” (Grupo de Cuentas Satélite, 2012), y también comienza, el control de malezas a través del plateo y desyerbe, junto a la poda que “se realiza una vez al año, preferiblemente en época de menor producción y su objetivo principal es facilitar las maniobras de la cosecha” (Aceites Manuelita S.A), logrando de esta manera, la cosecha, donde “La madurez del fruto es fundamental para la obtención de la mejor calidad del aceite extraído” (Grupo de Cuentas Satélite, 2012), y el “cosechero” hace corte de racimos, los cuales son “recolectados y transportados, el mismo día a la planta para evitar el deterioro de la calidad del aceite” (Grupo de Cuentas Satélite, 2012) e iniciar el proceso post-cosecha.
Una vez llega a la planta, el fruto se pesa y esteriliza, y a continuación es “cocinado con vapor a una temperatura aproximada de 135°C con el fin de eliminar la lipasa (enzima responsable de la acidificación del aceite). Con esta cocción, se produce el rompimiento de las celdas de aceite para facilitar su extracción (…) luego se deposita en una tolva que alimenta un tambor desfrutador, donde se produce la separación de los frutos del raquis (columna vertebral).” (Aceites Manuelita S.A) , a lo que el raquis es llevado como abono en los suelos más pobres. Finalmente, siguen algunos procesos como la digestión (“consiste en el rompimiento de las celdas que contienen el aceite, mediante el movimiento y la fricción de unos con otros” (Aceites Manuelita S.A)) el prensado (extraer el aceite contenido en la pulpa), la clarificación, el secado y el almacenamiento, para obtener; aceite de palma crudo, el cual se “utiliza en su forma natural en la industria de aceites y grasas comestibles (aceites líquidos y margarinas), concentrados para animales, jabones” (Agrocaribe), almendra de palma, aceite de palmiste crudo y torta de palmiste; productos, que serán usados como materia prima para la industria química, en la formulación de alimentos para ganado, cosmética y preparación de comestibles.