Imagen 1. La Flor de la Gulupa, Fruta Exótica Colombiana . Tomada por: Alejandro Romero, 2020
Alejandro Romero es un joven de 25 años, recién graduado de Ingeniería Industrial de la Universidad de los Andes. Su familia materna es de Manizales, y su abuelo ha tenido durante años una empresa de madera en Pensilvania, Caldas. Desde pequeño paso la mayoría de sus vacaciones en la finca con su abuelo, quien le enseño a amar el agro. Al realizar su tesis en una exportados de frutos exóticos, encontró una gran oportunidad para montar un negocio en este sector y cumplir sus sueños. Actualmente, tiene dos cultivos de Gulupa, y su sueño es continuar innovando en el agro con el fin de construir una red donde se discutan temas del agro, innovación y oportunidades de negocio con los cultivadores locales.
SD: ¿Cómo empezó tu relación con el tema agrícola?
AR: Desde pequeños mis hermanos y yo hemos tenido un gran arraigo con los temas del campo por Pensilvania y por la rama de mi abuelo materno. Siempre he sido un “fan” del campo.
SD: ¿Cuál es la historia detrás de este emprendimiento? ¿Qué te hizo emprender en el sector?
AR: Estudie Ingeniería Industrial en la Universidad de los Andes, y cuando estaba en séptimo semestre trabajé unos meses con una empresa exportadora de frutas exóticas que se llama Ocati. Los conocía de pura coincidencia, tenia un negocio de comercializar aguacates con un amigo de la universidad, donde comprábamos aguacate en caldas y lo vendíamos en corabastos. Era algo muy informal que solo hacíamos cuando teníamos tiempo.
Trabajando con las personas de Ocati, les ayude a diseñar una nueva planta de selección y empacado de frutas. Sus productos fuertes son las frutas exóticas como: la gulupa, la uchuva, la granadilla. Estaba metido en un tema muy de planta e ingeniería. Por ejemplo, los ayude a escoger algunos proveedores de maquina y resolvimos temas de tiempos y movimientos en la planta. Sin embargo, fui muy curioso con el tema agrícola, y traté de entender quienes eran sus proveedores, de donde traían las frutas, como manejaban el tema de la asistencia técnica y como pagaban.
Mi sueño siempre había sido montar un cultivo y estar involucrado en el tema. Cuando termine de trabajar con ellos, empecé a buscar tierras en Caldas (ya que era una zona fuerte para esa exportadora, Ocati) para convertirme en proveedor. Finalmente logramos negociar para que nos compraran una cantidad de gruta, por contrato a cuatro años, a precio fijo y con una asistencia técnica chévere.
Empezamos a buscar fincas y coincidencialmente un hermano de mi abuelo tiene un finca en Manizales donde cultiva aguacate. Le propuse el negocio, nos levantamos la plata, y sembramos el cultivo en abril del 2019. Ya está en cosecha, y estamos exportando toda la producción con certificados del ICA, GLOBALGAP y Rainforest.
Ocati exporta a Holanda y de ahí se distribuye a toda Europa: Alemania, España, Bélgica. Básicamente Europa central y occidental.
Imagen 2. Cultivo de Gulupa, Manizales, Caldas. Tomada por: Alejandro Romero, 2020
SD: Ya que los cultivos de Gulupa son relativamente nuevos, ¿a qué retos te has enfrentado?
AR: Uno de los temas más complicados del sector son los temas fitosanitarios. Por muchos años las normas de sanidad eran mucho más sencillas y el agricultor colombiano era muy descuidado e informal. Usaban productos para fumigar que estaban prohibidos, por falta de conocimiento. Por esto, a los productos agrícolas colombianos le cerraron muchas puertas en el extranjero.
Por ejemplo, en Estados Unidos aún no esta permitido el ingreso de pasifloras colombianas como la maracuyá, gulupa, granadilla, curuba, por temas entre el FDA y el ICA. Sin embargo, he visto como en los últimos años se han hecho muchos esfuerzos para tratar de abrir estas puertas. Ahora en las noticias vemos casos como el del aguacate: “Se concreta primera exportación de aguacate colombiano a China” (El Espectador, 2019).
Adicionalmente, exportar frutas exóticas es mucho más difícil en comparación a las flores, el banano y el aceite de palma, pues se manejan volúmenes más bajos y son sectores donde el agro no tiene mucha fuerza aún. También esta la coordinación, la mayoría de las veces, la producción de frutas exóticas se hace a través de un conjunto de pequeños productores, la mayoría informales, por lo que hacer gestiones a. nivel de gobierno no es fácil.
SD: ¿A qué retos personales te has enfrentado al emprender en el agro?
AR: ¡Muchos! Al ser recién graduado es muy cómodo entrar a trabajar a una empresa y conseguir un buen salario. Pero no quería ese camino, quería un reto más grande. En un principio hay que hacer muchos sacrificios y rebuscarse todo. Sin embargo he visto como a medida que las cosas van saliendo adelante, se va teniendo más estabilidad.
En el agro hay un tema muy teso que es el tiempo. Hoy en día estamos acostumbrados a las cosas inmediatas. Por ejemplo la gente que monta una startup de tecnología, los primero meses se consiguen muchos clientes, el crecimiento es muy acelerado. En el agro no es así. Siembras y al año estas recogiendo la cosecha. Como joven, uno quiere hacer cosas, moverse, hacer negocios y veces no es fácil acoplarse a esos tiempos.
SD: ¿En quién te has apoyado para conocer más del tema?
AR: En la parte técnica de ingenieros agrónomos. También me ha servido mucho el tipo de inversionistas que he tenido para los proyectos, es gente que ha tenido muchísima experiencia en el agro, que ha estado en mucho proyectos del sector y le dan a uno un apoyo chévere.
Es importante rodearse de gente que tenga experiencia en el sector, y no necesariamente en los mismo productos, que son más innovadores. Por ejemplo hay gente metida en marihuana medicinal, en arándanos, y es difícil encontrar personas con experiencia en eso. Pero se pueden rodear de gente importante en flores o hortalizas que tienen un “know how” relativamente parecido, entienden del negocio.
Creo que también es importante rodearse de gente que tenga muy claro todo lo que tiene que ver con la comercialización, yo diría que es el “corazón” de todo esto. Mejor dicho, si uno tiene el cliente y los precios desde antes de comenzar, se evita muchos dolores de cabeza.
SD: ¿Actualmente tienes más proyectos relacionados con el agro?
AR: A parte de los dos cultivos de gulupa estoy montando un cultivo de aguacate hass para exportación y una planta de compostaje para producir abonos orgánicos.
Imagen 3. Cultivo de Gulupa, Manizales, Caldas. Tomada por: Alejandro Romero, 2020
SD: ¿Cuál es tu sueño? ¿A qué quieres llegar con estos proyectos?
AR: Poder adquirir muchísimo “know how” a través de estas experiencias y proyectos, para el día de mañana replicar muchos de estos proyectos en gente que no tiene las mismas oportunidades.
Muchas veces los productores son personas informales, con falta de educación, pero es gente demasiado verraca, con una gran capacidad de trabajo inmensa y tenacidad. Les falta ser innovadores y encontrar un producto diferente que tenga buenas posibilidades comerciales o meterle un poco mas de tecnología a un cultivo que se ha manejado de una forma muy tradicional toda la vida.
Mi sueño es poder compartirles toda esta información de alguna manera, creo que podría cambiar muchas vidas. Si me preguntas ¿Cómo? en este momento no se, pero es mi objetivo en el largo plazo.
Fin de la entrevista.
Sofía Domínguez
30 de enero 2020
Imagen 4. Fruta Gulupa. Tomada por: Alejandro Romero, 2020
Referencias
El Espectador (3 de Diciembre de 2019). Se concreta primera exportación de aguacate a China. Obtenido de El Espectador: https://www.elespectador.com/economia/se-concreta-primera-exportacion-de-aguacate-colombiano-china-articulo-894017
El Colombiano (6 de Febrero de 2019). Gulupa, la estrella de la exportación colombiana. Obtenido de El Colombiano: https://www.elcolombiano.com/director-por-un-dia/jorge-mario-velasquez/gulupa-la-estrella-de-la-exportacion-colombiana-GG10164442