Hemos creado un muro entre Bogotá, las ciudades de provincia donde la población decrece significativamente mientras que las ciudades la recibe a toda por falta de oportunidades ¿Por qué no fijar en el Acuerdo unos sectores de interés nacional como el azúcar, el cacao, la ganadería y los lácteos? Es cierto que el azúcar en exceso es mala, pero es la materia prima de industrias como el aguardiente, la panela o los postres. Ya que se han dado reducciones en la competitividad del sector e impuestos a los productos provenientes de este, también debería dársele una ayuda para que no entre en crisis. El Acuerdo considera la soberanía alimentaria como un elemento importante, y por eso se debe crear programas para impulsar sectores como este, aumentar sus exportaciones y mejorar su competitividad.
Actualmente los estímulos se concentran sobretodo en sectores secundarios. Tal es el caso de la panela, ya que para la agenda del 2016, el Centro Democrático presentó un proyecto para promover la industria panelera. Al ser Colombia el segundo productor de panela a nivel mundial luego de Afganistán, esta ley es pertinente para incentivar la industria. Sin embargo, el estímulo no va hacia toda la cadena de valor. Se aplauden los estímulos a todos sectores, pero la falta de apoyo al azúcar ha hecho que a la larga el azúcar colombiano pierda competitividad respecto a otros países como Ecuador, Bolivia y Perú. Por nuestra falta de competitividad hoy día se importa azúcar boliviana y ecuatoriana.
Al no haber estímulos para la producción se deben considerar las falencias de esta. Aquí caben tanto los costos de transporte como de insumos. Ya que el Acuerdo se preocupa mucho por la seguridad alimentaria, debería buscar garantizar que algunos sectores se consideraran estratégicos para el gobierno. Entre estos debería hallarse el azúcar. Al haber nuevos impuestos en productos como el aguardiente y las gaseosas, la demanda por azúcar bajará. Ya que el único mecanismo para evitar esto es el Fondo de Estabilización mediante el cual se garantiza un precio a los azucareros, seguramente será insuficiente para aumentar la demanda. Además, fijar precios es insuficiente, por lo que se debería ampliar los programas para el sector formulando metas de exportación, producción y mejoras con especies nuevas.
Es por esto que el Acuerdo debería cubrir esta necesidad. Ya que en el Acuerdo no se habla del azúcar pero sí de un enfoque territorial en la página 17, crear programas especiales para zonas como el Valle del Cauca mejoraría la oferta. Por ejemplo, hace poco se reactivó el Ferrocarril del Pacífico ¿Por qué no darles un premio a los azucareros que lo usen como transporte subsidiado por la gobernación del Valle? Además de esto, hacer esquemas estilo Federación Nacional de Cafeteros (el cual ha sido muy exitoso para que los minifundios prosperen en el café) se podría usarlo para el azúcar y así hacer que en Zonas de Reserva Campesina se implementen cooperativas azucareras para exportar mayores volúmenes. Esto ayudaría a que además de lograr economías de escala con los latifundios, se logren economías de escala en los minifundios.
Además, crear una estrategia exportadora es una oportunidad para el sector. Hace poco la Unión Europea anunció que eliminaría las cuotas de azúcar, las cuales han sido monopolizadas por Brasil. Crear estrategias centradas para tener buenos productos a precios competitivos en Colombia, ayudaría a quitarle una parte del mercado a Brasil. Sólo a manera de ver los desafíos, Brasil recibe ayudas a su sector azucarero de 2.500 millones de dólares. Si se hacen buenos programas para esto, incluso sin esas ayudas al sector, se les podrá ganar un pedazo de las exportaciones a los brasileros.
Además, crear programas estatales para emplear parte de la producción nacional será útil para ambos bandos. A modo de anécdota, en Brasil la producción sobrante de café se usa para hacer café con leche y darlo en los refrigerios de los colegios. Otra idea para incentivar el consumo tanto de azúcar como de café, es hacer lotes de tiramisú o galletas de café para dar en los refrigerios de los colegios o de los trabajadores estatales. Esto ayudaría a reducir los costos de comida en el sector oficial y, además, ofrece oportunidad que evite el incremento de las importaciones de azúcar.
Para terminar, además de formular sectores estratégicos para el campo colombiano, se debe hacer un acompañamiento completo para asegurar su competitividad en el exterior. De nada sirve fijar precios si no hay mejoras en el producto y se debe mirar la canasta exportadora no para recibir subsidios sino para ser competitiva en el exterior. Es posible ganarle a Ecuador y Bolivia en este sector. Sólo hay que empezar a plantear programas.
Es bueno saber: ¿Por qué Celia Cruz decía “Azúcar”?
Conocida como la Reina de la Salsa, Celia Cruz solía gritar ¡Azúcar! en sus canciones. Cuentan que esta frase surgió de una vez que la artista estaba tomando café y cuando el mesero le preguntó si quería azúcar para acompañarlo, esta gritó “Si, con ¡Azúcar!”. Luego de esto lo empezó a usarlo seguido en sus canciones para darle sabor.
Bibliografía:
Centro Democrático. 20 de Julio de 2016. Centro Democrático Presenta paquete Legislativo. Recurso electrónico. Extraído de http://www.centrodemocratico.com/?q=articulo/centro-democratico-presenta-paquete-legislativo
El País. Octubre 11 de 2015. ¿Qué pasa con las importaciones de Azúcar en Colombia? Recurso electrónico. Extraído de http://www.elpais.com.co/elpais/economia/noticias/pasa-con-importaciones-azucar-colombia
Sobre el Fondo de Estabilización de Precios del Azúcar. Recurso electrónico. Extraído de http://www.fepa.com.co/
Revista Dinero. 19 de Octubre de 2016. La UE se prepara para poner fin a las cuotas azucareras para el 2018. Recurso electrónico. Extraído de http://www.dinero.com/internacional/articulo/la-union-europea-pone-fin-a-las-cuotas-a-la-produccion-de-azucar/235066