Imagen 1: planta de limón Tahití. Fuente: https://globobc.com/negocios/proyecto-de-exportacion-limon-tahiti/
En la actualidad un negocio que genera fuertes ingresos y otorga un gran retorno financiero es la exportación del limón Tahití o limón persa. Este se vende en las principales potencias del mundo tales como Estados Unidos y Europa. Así que, en primer lugar, se hablará acerca de las ventajas que tiene este producto al exportarse. Y luego, se examinarán algunas dificultades que pueden surgir al cultivar el limón Tahití.
En primer lugar, el limón Tahití es un atractivo de exportación ya que el mercado de esta fruta crece a una tasa anual del 3,7% (Dinero, 2017). Además, tiene ciertas características que le otorgan algunas ventajas específicas frente a otros productos. Un punto diferenciador que tiene el limón Tahití colombiano es que gracias a los tratados de libre comercio con Estados Unidos y Europa esta fruta no tiene ningún arancel. Por otro lado, este producto se recoge en épocas distintas a las de las principales cosechas de los otros países productores y cuenta con una calidad superior frente al limón africano. Esto le otorga una ventaja competitiva en los mercados del Norte.
Imagen 2: planta empacadora de limones. Fuente: foto tomada por Andrés Arango
Otra ventaja importante es el precio de este producto. Las principales plazas de mercado en el exterior compran el limón a un precio mucho mayor que los mercados locales. Debido a esto, los productores locales se pueden internacionalizar y para esto se ven obligados a adoptar prácticas agrícolas más sofisticadas, eficientes y modernas. El limón persa es una oportunidad para reinventarse y ofrecer nuevos productos. Esto permite generar nuevos empleos y una nueva cultura empresarial. Para Andrés Arango, un exportador de limón en la ciudad de Pereira:
“El limón Tahití le permite a Colombia llevar su marca país a mercados muy importantes como el de Estados Unidos. El TLC y las aceptaciones fitosanitarias en ese país nos abren una ventana muy importante que la hemos venido aprovechando y que podríamos explotar más”.
Imagen 3: conteiner de limones listo para salir hacia Estados Unidos. Fuente: foto tomada por Andrés Arango
Por otra parte, para Carlos Otero, gerente de la empresa Frucamp: “el inicio de operaciones fue más amargo de lo que jamás previmos” (Revista Dinero, 2019). Este producto fue rechazado en el continente europeo. Las diferentes manchas y algunos defectos de calidad fueron los motivos principales. A pesar de esto, los problemas se pueden evitar al modificar el proceso de producción. Los inconvenientes empezaban a la hora de la recolección. Estos cítricos no se pueden recolectar cuando se encuentran húmedos, deben estar secos con el fin de evitar manchas. En adición, el limón no se puede jalar con la mano ya que pierde el cáliz (parte del limón que se encuentra pegada al árbol) y puede exponerse a las enfermedades. Este producto debe reposar por un día, así obtiene mayor resistencia, de esta manera pierde toda la humedad y la entrada de bacterias.
Entonces, al realizar mejoras en estos aspectos los limones podrán pasar las pruebas de los consumidores en Europa, siendo estos los más exigentes. Sin embargo, es mucho más provechoso exportar esta fruta a plazas en Estados Unidos, como por ejemplo Miami, Nueva York y Los Ángeles, esto debido a que los consumidores son menos estrictos.
Imagen 4: siembra de limones en el departamento de Risaralda. Fuente: foto tomada por Andrés Arango
A manera de conclusión, Colombia continúa siendo un país poco conocido en el mercado mundial del limón. El total de la producción anual de esta nación es de 30.000 toneladas. Esto es muy poco en comparación con el total de la producción mundial (el total anual es de alrededor 10 millones de toneladas).A pesar de esto, el limón Tahití es un desafío que interesa a muchos y parece que vale la pena arriesgarse.
Bibliografía:
https://www.dinero.com/edicion-impresa/negocios/articulo/verdes-atractivos/21285